La moda de comer sin gluten.
Hoy me meto en terreno pantanoso porque he decidido dar mi opinión sobre toda esa gente que ha decidido dejar de comer gluten.
Pero ojo, dejar de comer gluten no porque tengan un diagnostico medico que les diga que son celiacos; o sensibles al gluten o cualquier otra patología en la cual, por prescripción médica, todos los alimentos que contengan gluten deben ser retirados de la dieta.
NO. Hablo de esa gente que no come gluten porque «está de moda»; porque «es que creo que el trigo me hincha la tripa» o porque «no comer gluten adelgaza». Y ya lo más: «porque yo creo que soy un poco celíaco».
Ummmmmmmmmmm. Hago un par de respiraciones antes de continuar escribiendo.
No me voy a meter en si dejar de comer gluten es, para las personas que no tienen verdaderamente problemas con él, beneficioso o no.
No soy médico. Dejo ese terreno a quien corresponda y además creo que hay opiniones encontradas con respecto al tema.
Voy a escribir sobre el daño que nos hacen con su manera de ir por la vida a las personas que NUNCA, JAMAS DE LOS JAMASES, podemos comer gluten.
Porque esas personas que entre semana no comen gluten, cuando llega el sábado y salen a cerrar por ahí, deciden que ese día no pasa nada por saltarse la dieta.
Y es que realmente no pasa nada para ellos. Así que comen pan, pasta o todo lo que se les ponga por delante.
Pero claro, al camarero antes le han dicho: «no, es que yo soy poco celíaco así que por un día que coma gluten, no pasa nada».
O también: «quiero estos espaguetis carbonara (glutaneros, por supuesto), pero luego me traes pan y cerveza sin gluten»
Los pelos como escarpias se me ponen.
Y luego, ese mismo camarero viene a atenderme a mí.
Y yo para asegurarme de que mi comida está además de sin gluten, sin trazas en el cocinado, le pregunto casi casi hasta por la procedencia de la vaca.
Así que me mira con cara de: «ya me ha tocado la clienta histérica del gluten».
Hay amigos y amigas. A que ¿os suena?
Daño, mucho daño nos hace ver a famosos en las revistas o en la televisión que no son celiacos, comprando productos sin gluten porque de esa manera «se sienten menos hinchados o mejoran su rendimiento deportivo«.
Moda de dietas veganas, Dukan, paleo… y ahora «sin gluten».
No señores.
Para los celiacos, para ese 1% de la población que JAMAS podemos comer gluten, no comerlo no es una moda. Es una necesidad. Es nuestra manera de estar sanos. La única que tenemos.
Porque prescindir del gluten no es divertido. No es el nuevo modo de perder peso.
Y entre otras cosas, nuestros productos, que encima no son precisamente los más saludables, nos cuestan mucho, pero mucho más dinero que los glutaneros.
Así que por favor, absténganse de no comer gluten por moda. A los que no lo podemos hacer, nos hacen mucho daño.
Helena
Buff que razón! Si supiéran las consecuencias de comer gluten y como nos ponemos no lo harían y luego lo del precio, tienes que hacer un blog de lo que se incrementa el precio de la cesta de la compra al comprar sin gluten…
Que se me había pasado contestarte¡¡¡ tengo semi preparado ese post comparativo de los productos sin gluten¡¡. Besado